La enfermedad de Gumboro o bursitis infecciosa aviar es una afección común de los pollos domésticos en todo el mundo. Puede presentarse como una enfermedad clínica o subclínica, pero normalmente se observa inmunosupresión e infecciones secundarias relacionadas. La gravedad de la inmunosupresión depende de la virulencia del virus infeccioso y de la edad del huésped.
Etiología y transmisión:
La enfermedad de Gumboro es causada por un birnavirus (virus de la enfermedad infecciosa de la bolsa; IBD) que se aísla más fácilmente de la bolsa de Fabricio, pero que puede aislarse de otros órganos. Se vierte en las heces y es transferido de casa en casa por los fómites. Es muy estable y difícil de erradicar de las granjas o galpones dedicados a la crianza de pollos.
Se han identificado dos serotipos de IBD. Los virus del serotipo 1 causan enfermedades en los pollos y, dentro de ellos, pueden existir variaciones antigénicas entre las cepas. La deriva antigénica es en gran medida responsable de esta variación antigénica, pero las diferencias antigénicas también pueden ocurrir a través de la recombinación homóloga del genoma. Las cepas del serotipo 2 del virus infectan a pollos y pavos pero no han causado enfermedad clínica o inmunosupresión en estos huéspedes. Se han identificado IBD en otras especies de aves, incluyendo pingüinos, y se han visto anticuerpos contra IBD en varias especies de aves silvestres. Se desconoce la contribución del IBD a la enfermedad en las aves silvestres.
Control de la enfermedad de Gumboro:
No hay tratamiento. La desinfección rigurosa las granjas y galpones contaminados después de la despoblación ha tenido un éxito limitado. Las vacunas vivas de embrión de pollo o de cultivo celular y de baja patogenicidad variable pueden administrarse por vía ocular, agua potable o inyección subcutánea en los primeros 21 días de vida del pollo. La replicación de estas vacunas y, por lo tanto, la respuesta inmunitaria puede ser alterada por el anticuerpo materno, aunque las cepas más virulentas de la vacuna pueden anular los niveles más altos de anticuerpos maternos. Las vacunas vectorizadas que expresan la proteína IBD VP2 en el herpesvirus de los pavos (HVT) pueden utilizarse in ovo (inyección de la vacuna en el huevo) o en la eclosión. Estas vacunas HVT-IBD no se ven afectadas por los anticuerpos maternos. Las vacunas que utilizan virus vivos atenuados unidos a anticuerpos (vacunas inmunocomplejas) también están disponibles para la administración in ovo o en el momento de la eclosión.
Los altos niveles de anticuerpos maternos durante la cría de los pollos de engorde (y en algunas operaciones de puesta comercial) pueden minimizar la infección temprana, la subsiguiente inmunosupresión, o ambas cosas. Las bandadas de reproductores deben ser vacunadas una o más veces durante el período de crecimiento, primero con una vacuna viva y de nuevo justo antes de la producción de huevos con una vacuna inactivada. Existen vacunas inactivadas de origen embrionario de pollo, de bursa o de cultivo celular. Estas últimas vacunas inducen niveles de anticuerpos más altos, más uniformes y más persistentes que las vacunas vivas. La situación inmunitaria de las manadas de reproductores deberá controlarse periódicamente mediante una prueba serológica cuantitativa, como la neutralización del virus o la prueba ELISA. Si los niveles de anticuerpos disminuyen, las gallinas deben ser revacunadas para mantener una inmunidad adecuada en la progenie.
El objetivo de cualquier programa de vacunación contra la enfermedad de Gumboro debe ser utilizar las vacunas que más se ajusten al perfil antigénico de los virus de campo. Las pruebas de diagnóstico de las secuencias genómicas de las cepas de campo pueden utilizarse para seleccionar el programa de vacunación más adecuado.
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